
Con el Mustang atendido por el equipo Hnos. Álvarez Motor Sports, Bonelli pegó un salto de calidad aunque todavía no se refleje en los resultados.
Después de muchos años con su equipo y la experiencia de dos años junto al RUS MED Team, Nicolás Bonelli apostó en esta temporada por el equipo de los hermanos Cristian y Gastón Álvarez para que atienda el Ford Mustang que armó con su hermano Próspero.
“Arrancamos un lindo año. Por ahí no se dio el resultado que esperábamos en Calafate, por la cuestión de una goma, pero el auto tiene buen rendimiento y estoy muy conforme con el trabajo de los hermanos Álvarez. Se armó un lindo conjunto y espero que durante el año se den buenos resultados”, comentó Nico en diálogo con Tribuna 2 en los boxes de Neuquén.
“El auto lo armamos con Pope en el taller, en seis, siete meses. Armábamos los motores y lo que nos sobraba de tiempo se lo dedicábamos al Mustang, y nació bien. Cuando lo acomodamos en Viedma, porque tenía una ida de trompa, nos metimos entre los diez. Después se trabajó para El Calafate y las modificaciones que hicimos dieron sus frutos, se mostró bien y lo más difícil va a ser mantenernos en este nivel”, añadió.

Cuando lo consultamos sobre la performance de los vehículos estrenados en 2024, el de Concepción del Uruguay expresó: “Los autos de nueva generación son totalmente distintos a lo que veníamos manejando; tienen una aerodinámica diferente, con más carga, frenan mejor, doblan mejor, y el problema de cola con el que penábamos en el Falcon, no lo encontramos en el Mustang, y carrera a carrera se va mejorando”.
Y así como los coches mejoraron, la competitividad del TC es aún mayor, lo que obliga a redoblar esfuerzos para meterse entre los protagonistas. “La categoría va evolucionando, por eso se bajan los récords en la mayoría de los circuitos y quedan 30 autos encerrados en un segundo. En el primer entrenamiento de Viedma estaba undécimo, a dos décimas del primero y no lo podía creer. Eso es mérito de todos los equipos y de la Técnica de la categoría, que ha hecho un trabajo muy lindo con estos autos”, manifestó el entrerriano.

Va por la primera alegría
Al momento de preguntarle sobre las metas para esta temporada, Bonelli fue claro: “El objetivo es lograr ganar mi primera carrera, y el buen funcionamiento nos va a permitir entrar a la Copa de Oro. Venimos de hacer un año malo, y con estas dos carreras, hemos sacado la cabeza y respiramos un poquito en cuanto a funcionamiento, pero bueno, hay que concretarlo con resultados en pista”.
Y concluyó: “Siempre le agradezco al grupo de sponsors que nos acompaña, porque cada año que pasa se pone más difícil para juntar el presupuesto; así como se pone difícil en lo competitivo, también se pone difícil en lo económico, así que muchas gracias a ellos porque son los artífices de que estamos en el TC”.
