El campeón de la Clase Dos remarcó la importancia de sumar y ser regulares para alcanzar el campeonato, al igual que el trabajo del equipo.
Al mando del VW Up del equipo Pilar Racing, Nicolás Herrera fue el que mejor hizo las cosas en la temporada 2025 de la Clase Dos.
Con dos triunfos (Buenos Aires y Toay), el cordobés arribó a la definición como puntero y se le dieron las cosas a favor para gritar campeón. “La verdad que es un sueño llegar a esta instancia. Cuando arrancamos en la categoría, hace tres años atrás, el objetivo era pelear un campeonato, pero llegamos, lo peleamos y lo ganamos, así que tremendo trabajo”, comentó el flamante monarca de la divisional intermedia.
“Siempre confíe en mi equipo, con Fernando Monti, Juanjo Cassou en los motores, Nico Cortiñas en la parte técnica, y poder llegar a este resultado junto a ellos me enorgullece y me hace bien. Ellos fueron el pilar fundamental de todo, al igual que las publicidades, que apoyaron este proyecto, y mi familia. Trabajamos mucho, tuvimos mucha perseverancia para llegar a este campeonato, pero sin dudas fueron las claves”, completó.
En cuanto a la definición, Herrera recordó: “Me dediqué a correr y cuidarme para no perder posiciones, porque no tenía para ir a correrlo a Pablo (Vázquez); sabía que si llegaba hasta tres posiciones detrás de él, me alcanzaba. Y con Joaquín (Melo) pasaba lo mismo, tenía que terminar dos lugares delante de mí, así que venía rápido. Era aguantar y no relajarme, siempre concentrado”.
Respecto a la estrategia de la temporada, Nico contó: “Había que ser regulares y sumar un promedio en todas las fechas. Agarre el puntaje del año pasado de Lantella, lo dividí por las fechas y fijé ese promedio. Hasta la carrera de Buenos Aires venía bajo, pero con los triunfos allí lo levantamos, me empezaron a dar los números y de a poco empezamos a subir hasta la última fecha, donde llegamos en la pelea”.
Foto Tribuna 2 – Texto Fernando Rossetti
