Juan Nimo: “Pudimos cumplir el objetivo de terminarlo”
Sube a la rampa de llegada del Desafío Ruta 40 con su Honda adaptada y los dos mochileros, Eduardo Parra y Agustín Pedersen, y festejan el podio conseguido en el Desafío Ansenuza.
Juan María Nimo completó una nueva travesía arriba de una moto y su rostro de felicidad demostraba que la meta estaba por demás cumplida.
“Fue duro el Desafío, este año nos costó más que el año pasado. Quizás en el 2023 teníamos la locura de poder hacerlo y llegar, sin la necesidad de buscar un resultado. Este año nos anotamos en el Ansenuza, que es nacional y más acorde a nuestras expectativas, con bastantes kilómetros menos, pero al final hizo el 90 y pico por ciento de la competencia y la verdad es que se puso difícil”, le cuenta el “Gato” a Tribuna 2.
Y continúa: “Por suerte pudimos cumplir el objetivo de terminarlo. En la primera etapa, que fue muy exigente, en la que muchos quedaron afuera y pudieron reengancharse al día siguiente pero con mucha penalización, nosotros pudimos finalizarla y, en el resto de la semana, administramos la diferencia y llegamos al podio, así que estoy feliz”.
¿Fue un recorrido difícil o tuvieron complicaciones ustedes?
El terreno estaba muy complicado, porque al largar desde atrás, te encontrás con caminos muy complicados. También lo hizo muy difícil el clima, porque al largar tan tarde, las horas de día son menos, al bajar el sol, baja mucho la temperatura también, y a veces, en el tramo de velocidad, nos agarraba la noche, y los enlaces fueron muy largos también.
¿Cómo funcionaron las motos?
La verdad que todo nos fue muy bien. Eduardo y Agustín no son solo mis mochileros, sino que, cuando llegamos a los campamentos, se ponen a trabajar en las motos porque ellos son los mecánicos. Así que es increíble todo lo que vivimos, porque el entendimiento entre los tres es excelente. Entre las tres motos creo que cambiamos 23 o 24 filtros de aire, algunos en los tramos, otros en los enlaces o en los campamentos, consumieron un poquito más de aceite, pero las motos no tuvieron ningún problema, llegaron sin problema.
¿El próximo objetivo es hacer el Dakar?
Es muy difícil hacerlo. Yo me animo, aunque también hay una cuestión de miedo y tabú en cuanto a la discapacidad, sobre todo arriba de una moto, y es como que uno gira en círculo poniendo lo ejemplificador por delante y nunca es profesional en lo que hace, entonces hagas lo que hagas y logres lo que logres, siempre lo ejemplificador está en el medio y eso impide que las empresas te vean como un profesional, por eso es muy difícil contar con los recursos para hacer el Dakar. Obviamente que el sueño siempre está, y es como le dije a los chicos en la rampa; nosotros podemos hacer todo lo más profesional posible, pero tenemos que seguir poniendo lo mejor de nosotros para que las empresas se fijen en lo que hacemos. De todas formas, estamos muy contentos por poder hacer un podio en Ansenuza y soñar con llegar algún día.
¿Cuál es la próxima actividad?
Ahora nos vamos a tomar unos días para descansar, porque fue una carrera muy exigente, no solo en la competencia sino también en toda la preparación previa, e iré viendo que se puede hacer más adelante; en las motos y en los autos.
